La vida en todas sus dimensiones. La poesía de Beatriz Villacañas
En su muro de Facebook el poeta Jesús Aparicio ha compartido sus impresiones sobre la lectura de la antología poética de Beatriz Villacañas publicada por Ediciones Deslinde.
(Astrología interior, se presenta el viernes 31 de enero de 2019, a las 19:30h, en Madrid, en El Corte Inglés de Callao, Ámbito Cultural, 4ta planta.)
Transcribimos las palabras del poeta Jesús Aparicio:
“Estos poemas nacen del universo interior que nos habita, pues en él coexisten las luces y las sombras, las tormentas y la calma, la belleza y el misterio” confiesa Beatriz Villacañas en el pequeño prólogo ,“Astroantología”, que abre esta selección de sus propios poemas que recientemente ha publicado la autora y que nos deja buena muestra de sus diez libros, desde Jazz publicado en el año 1991 hasta La voz que me despierta de 2017.
La vida en todas sus dimensiones: el amor (tanto filial, como erótico y religioso), la poesía con su verdad más profunda y esencial, el paso del tiempo con sus alegrías y tristezas, la muerte, el anhelo de conocer y el sentimiento de un Dios cercano, y esa transcendencia que nos lleva al tiempo del Padre, para el reencuentro también con su amado y admirado padre Juan Antonio Villacañas (también poeta y su maestro): “Qué nueva identidad me dio tu muerte, /qué nuevo amor con el que hablo contigo,/me dio un lenguaje libre de palabras/y un infinito amigo”, son los temas que aborda en este excelente caminar poético, ese que pretende “devolver a las palabras/ la verdad que alguna vez tuvieron.”
Una obra poética, la de nuestra autora, que demuestra una gran maestría en la utilización tanto del verso blanco como de las formas clásicas, especialmente la llamada “lira juanantoniana” heredada de su padre, pero al mismo tiempo jalonada con admirables sonetos e inspirados y esenciales haikus que llenan esa joya de libro que es Testigo del asombro publicado en el 2014 por Ediciones Vitruvio.
Clarea el día
el pájaro abre el canto:
Epifanía.
En soledad,
el alma palpa a ciegas
la claridad.
Son dos ejemplos de magia y sensibilidad poética.
Poesía inspirada, meditada, profunda y bien trabajada, de una toledana que sabe escuchar en el transcurrir del día la voz que la despierta en secreto con cada cosa “como al monje le llama la campana,/…y se abre a la fe cada mañana”. Hay que creer, saber dar vida a lo poético como Beatriz, pues “El tiempo nos esculpe y nos destruye, / la eternidad aguarda y nos rescata“.